La isla de Bergai es un lugar al que llegas con solo cerrar los ojos. Lo descubrió Carmen Martín Gaite.
Puedes viajar a la isla de Bergai cuando sientas que la gente no te quiere, cuando sepas que necesitas consuelo.
Las conversaciones que se convirtieron en entrevistas para su publicación suscitan en mí recuerdos de personas admirables y admiradas, y reflexiones del género periodístico que adoro. Rescato en este blog 44 encuentros con mujeres y hombres que tuvieron algo que decir y cuyos pensamientos todavía hoy merece la pena escuchar. Gracias a todos ellos. A su cordialidad, a su inteligencia y a su tiempo dedicado a responder a mis preguntas.
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